Restaurante El Jardín del Mar

Si buscas un buen sitio para comer o cenar en Madrid, El Jardín del Mar, en Avenida de los Andes, 48, es una apuesta segura. Aquí podrás disfrutar de pescados y mariscos frescos, además de frituras reinventadas y arroces que te harán la boca agua. El ambiente es desenfadado y súper agradable, perfecto para esos días de calor, ya que cuentan con una buena terraza donde te refrescan con agua deliciosa.

Además, el personal es muy amable, lo que hace que tu experiencia sea aún más placentera. Si te apetece un vermut entre amigos, este lugar es ideal. Y no te olvides de probar sus postres caseros; son un verdadero lujo. En total, el Jardín del Mar te ofrece un pedacito del mar sin salir de la ciudad, justo frente al Corte Inglés del Campo de las Naciones.

Dónde se ubica El Jardín del Mar en Madrid

¡Hola, grupo! Quiero contarles sobre mi experiencia en El Jardín del Mar, un restaurante que está en Av. de los Andes, 48, Hortaleza, 28042 Madrid. La verdad, me sorprendió lo bien que se come ahí y el ambiente es súper agradable. Es un espacio amplio y relajado, con una decoración que tiene un toque marino que te hace sentir como si estuvieras de vacaciones. ¡Perfecto para desconectar un poco!

Entre los platos que probé, el guacamole con camarones y la ensaladilla rusa nos dejaron a todos boquiabiertos. Eran una delicia. La comida en general fue buena, ideal para sentarse a picar aperitivos más que para un plato principal sustancioso. Eso sí, ¡los postres estaban de rechupete! La tarta de queso, en particular, es para quitarse el sombrero. La única pega que podría mencionar es que la cuenta puede ser un poco elevada, así que prepárense para gastar entre 40-50 € por persona.

Si están buscando un lugar con un buen servicio y un ambiente muy agradable, aquí no tendrán queja. La música de fondo es suave, lo que hace que la experiencia sea aún más chula. Me gusta que también tienen opciones vegetarianas, aunque el menú es más variado en otros sentidos. Pero, vamos, el guacamole se roba el show, y es que la calidad de los platos es de primera.

Así que, en resumen, si se preguntan dónde se ubica El Jardín del Mar en Madrid, ya saben, está en Av. de los Andes, 48. Un lugar bonito donde se come genial. ¡Anímense a probarlo! Seguro que no se arrepienten. ¡Espero volver pronto y disfrutar de otra comida deliciosa en ese hermoso jardín trasero!

Qué tipo de comida se puede disfrutar en El Jardín del Mar

¡Y ya te digo que El Jardín del Mar es todo un descubrimiento! La tercera vez que fui, decidí probar la terraza cubierta que tienen, ideal para esos ocasones en los que el tiempo no acompaña del todo, pero quieres disfrutar al aire libre. Tienen unas mesitas cómodas y la musiquita de fondo crea un ambiente súper acogedor. Lo mejor es que puedes ir con tu peludito y disfrutar de una cena sin preocupaciones. La verdad es que cada vez que vamos, siempre salimos encantados. ¡Y eso que llevan a nuestra perra!

Hablando de la comida, ¡vaya festín! Tienen una carta muy original centrada en pescados y mariscos que te deja sin palabras. Desde el guacamole con gambas que me sorprendió gratamente, hasta el cachopo de atún, que es simplemente espectacular. Además, ¡si eres fan del fish & chips, no te lo puedes perder! Las croquetas son otro nivel: con una bechamel cremosa y una fritura perfecta que no dejan nada de grasa. Todo está preparado con mucho mimo y se nota, de verdad.

En cuanto a precios, puede variar un poco, pero te diría que puedes disfrutar de todo esto en un rango de 20-30 € por persona si te moderas, y puedes probar una buena variedad. Lo que gana de lleno es el servicio: siempre te tratan con amabilidad y familiaridad, como si fueras de la casa. Así que, si estás buscando un sitio con un poco de secreto y encanto para sorprender a alguien especial, El Jardín del Mar deberías apuntarlo en tu lista. ¡Prometido que no te decepcionará!

Entonces, ¿qué tipo de comida puedes disfrutar aquí? Pues, principalmente vas a encontrar pescados y mariscos frescos, con algunas delicias como el guacamole con gambas, el rodaballo, y esa maravillosa mezcla de cachopo de atún. Todo un festín que vale la pena probar, y que sin duda te hará querer repetir la visita.

Cuáles son los platos destacados en el menú de El Jardín del Mar

Y después de ese emocionante paseo por el barrio, terminó siendo un gran acierto pasar por El Jardín del Mar. ¿Sabes qué? La primera impresión que me llevé fue fantástica; el local es moderno y cuidado, y la atención al detalle se nota en cada rincón. ¡Hasta el baño me pareció precioso! Y no me malinterpretes, es un detalle que no solvemos considerar, pero aquí realmente se lo han currado. Perfecto para un escarceo romántico o una quedada con colegas.

La comida, como no, es otra historia. Si te gusta el marisco, este sitio es un paraíso. El arroz con bogavante es simplemente un escándalo, sabe a bogavante de verdad, no a esa cosa de paquete que a veces te sirven en otras partes. Y ni hablar de las rabas y las croquetas; están tan bien hechas que te vas a querer pedir más. También probé unos huevos rotos con pulpo que son la bomba, un plato que se ha convertido en mi favorito. La variedad en la carta es impresionante, porque puedes elegir entre platos clásicos o atreverte a pedir algo más audaz, como el cachopo de atún con queso payoyo.

Lo mejor es que, después de disfrutar de un festín, no puedes olvidarte de dejar hueco para el postre. Si pruebas la tarta de queso, prepárate para quedarte boquiabierto; es enorme y jugosa, con un centro que parece yogur. Y no puedo dejar de mencionar la torrija con chocolate blanco, que es el toque dulce perfecto para culminar una comida espectacular.

Entonces, si te preguntas cuáles son los platos destacados en el menú de El Jardín del Mar, definitivamente incluye el arroz con bogavante, los huevos rotos con pulpo, esa ensaladilla con camarones, y por supuesto, el cachopo de atún. Y no te olvides de dejar espacio para las delicias dulces como la tarta de queso y la torrija. Con un precio por persona que ronda entre los 30-40 €, es un lugar que realmente vale la pena visitar. ¡Ya estoy deseando volver!

El Jardín del Mar cuenta con espacio al aire libre

La verdad es que si aún no has probado El Jardín del Mar, te estás perdiendo de algo increíble. Ya he ido tres veces y cada vez estoy más convencido de que se merece esas 5 estrellas que le ponen. Si te gustan los mariscos, no puedes dejar de probar el mollete de calamares y el croquetón de bacalao —son, sin duda, imprescindibles. Y no me hagas empezar con la tarta de queso... ¡simplemente deliciosa! Además, las ostras y la mini hamburguesa tienen un sabor que te va a dejar con ganas de más. La atención es otro punto a favor, los camareros son súper majos y siempre están pendientes; eso es algo que se agradece.

La última vez que fui a celebrar un cumpleaños con unos amigos, quedé impresionado. Desde que entras, el lugar tiene una buena vibra. Se nota que están atentos a los detalles, el local está decorado con gusto y cuenta con grandes ventanales que te hacen sentir que comes al aire libre, ¡incluso si estás dentro! No había visto eso muchas veces. La lubina que pedí fue increíble; se notaba que era fresquísima y en su justo punto. Aparte de eso, si eres fan de los postres, no te puedes ir sin probar la torrija con helado. Y sí, el fallo de no tener Coca-Cola es algo que deberían solucionar, pero bueno, ¡pequeños detalles!

En cuanto a la pregunta que siempre me hacen: ¿El Jardín del Mar cuenta con espacio al aire libre? ¡Sí! Aunque no lo mencioné antes, hay una terraza muy coqueta que promete ser un sitio ideal para disfrutar de una buena comida cuando hace buen tiempo. Así que cuando vayas, échale un vistazo a la terraza que seguro querrás volver en cuanto la veas. Al final, este es un sitio que invito a repetir sin pensarlo dos veces; la relación calidad-precio es genial, especialmente teniendo en cuenta la zona. ¡A disfrutar!

Qué características tiene la terraza de El Jardín del Mar

El otro día estuve en El Jardín del Mar, y la verdad es que salí encantado. La terraza es preciosa y muy agradable, perfecta para disfrutar de una buena comida al aire libre. Me pedí la ensalada César de atún, que me dejó sin palabras; estaba llena de sabor y súper fresca. Y no te olvides del helado de mango servido en una piña— ¡una delicia tropical que tengo que repetir! La vibra del lugar es increíble, lo clasificaría como un 5 estrellas sin dudarlo.

La experiencia no solo fue buena por la comida, sino también por el servicio; el camarero era genial, muy atento y amigable. Pedimos varias cosas para compartir, como la ensalada de ventresca y unas croquetas de jamón, que eran perfectas para picar sin terminar hinchados. Todo estaba riquísimo, y además el ambiente es muy tranquilo, ideal para relajarte después de un día ajetreado. De hecho, la pluma ibérica que pedimos estaba de 10. Si buscas algo sabroso y bien presentado, este es el sitio.

Ahora bien, no todo es perfecto. He oído comentarios de que la calidad ha bajado un poco últimamente, así que es buena idea ir con expectativas realistas. Pero la decoración sigue siendo magnífica, con ese toque marinero que da gusto ver. La terraza tiene unos rociadores de vapor de agua que hacen que se esté a gusto incluso en los días más calurosos, así que si decides visitarlo, ¡no olvides disfrutar de ese espacio!

En resumen, si te preguntas sobre la terraza de El Jardín del Mar, puedo decirte que es amplia y moderna, perfecta para esas comidas veraniegas, y cuenta con detalles que la hacen ideal para pasar un rato agradable. Así que ya sabes, ¡100% hay que visitarlo si quieres buena comida y un ambiente relajante! ️✨

Cómo es el ambiente en El Jardín del Mar

Y bueno, si hablamos de El Jardín del Mar, es casi imposible no mencionarlo como uno de esos lugares que se vuelven imprescindibles. A nosotros nos pilló cerca de la oficina y, desde entonces, hemos estado yendo más veces de las que nos gustaría admitir. La comida es espectacular y el ambiente es súper acogedor. Ya sea para ir a picar un par de platos y luego seguir con un segundo, o si decides lanzarte y pedir todo para compartir, las cantidades son generosas, así que ¡prepárate para disfrutar!

Te cuento que mis platos favoritos son la ensaladilla rusa con camarones, que siempre me parece un acierto, y las croquetas, que son para no parar. Si te gustan los aperitivos un poco más exóticos, el guacamole con gambas también está para chuparse los dedos. Y aunque a veces los precios no son los más baratos (entre 20-30 € por persona), compensa de sobra por la calidad de la comida y el servicio, que es siempre amable y atento.

Sin embargo, no todo ha sido perfecto. Recientemente, escuchamos de un mal trago que tuvieron unos amigos, quienes se llevaron una increíble decepción con unos berberechos que les hicieron irse directos a urgencias. ¡Qué susto! Así que, si decides probar marisco, asegúrate de que esté fresquito. La opinión es diversa, porque hay quienes elogian el servicio profesional y la buena relación calidad-precio, sobre todo cuando se trata de pescado. Desde el rape insuperable hasta esos mejillones fresquitos, parece que hay platos que nunca fallan.

Ahora, en cuanto al ambiente de El Jardín del Mar, te diré que el lugar está muy bien cuidado, especialmente la terraza, que es ideal para cenar en las cálidas noches de verano. La atmósfera es relajada y amigable, haciendo que cada visita se sienta como un pequeño escape del estrés diario. Lo mejor es que, entre tanto ruido de la ciudad, aquí puedes disfrutar de una buena comida con amigos mientras te sientes a gusto. Así que, si no lo has probado aún, ya estás tardando en organizar una cena aquí. ¡No te arrepentirás!

Es El Jardín del Mar un lugar adecuado para comidas en grupo

Y claro, El Jardín del Mar no decepciona cuando se trata de disfrutar de una buena comida, aunque a veces tiene sus altibajos. La última vez que fui, optamos por comer un viernes y, aunque no había demasiada gente, sentí que podían hacer un poco más considerando los precios. Pedimos un buen vino blanco pero, para variar, no tenían ninguna de las botellas que elegimos. ¡Un pequeño fallo, aunque no arruinó el plan! La comida estuvo bastante bien, especialmente el rodaballo, que es uno de esos platos que vale la pena probar. Salió por unos 50-60 euros por persona, una cifra un poco elevada, pero el ambiente estaba muy bien – merecería un 4 en ambiente y comida, y 3 en servicio.

La primera vez que fuimos a cena sin reserva, el sitio nos sorprendió con un menú de picoteo y la verdad es que fue todo un acierto. Nos decantamos por la croqueta de bacalao y la ensaladilla rusa, que estaban muy bien presentadas y sabrosas. Aunque El Jardín es conocido por su pescado, nos lanzamos por unas mini hamburguesas de buey, que estaban de muerte. Eso sí, un detalle que siempre me queda dando vueltas es el tema de los refrescos; esos 20cl se quedan cortos, ¿no? En general, aunque los precios son un poco altos, estamos considerando volver, porque la experiencia fue agradable.

Cuando una cena de empresa me llevó a su terraza, tuve que rendirme ante el ambiente increíble de ese lugar. Los camareros estuvieron super atenta y amables, haciendo todo lo posible para acomodarnos, incluso cuando les hicimos cambiar la disposición. El menú de grupo que tuvieron para nosotros fue todo un delirio: desde la ensaladilla rusa con camarones fritos hasta el ojo de bife y la merluza asada. Y no puedo dejar de mencionar la tarta de queso, un final espectacular.

Así que, ¿El Jardín del Mar es un lugar adecuado para comidas en grupo? ¡Definitivamente! Tiene el ambiente perfecto, un servicio que se preocupa por los detalles y un menú que puede adaptarse a diferentes gustos y necesidades. Además, con platos tan variados y bien elaborados, es un sitio que no dejará a nadie insatisfecho. ¡Ideal para cualquier ocasión!

El personal de El Jardín del Mar es amable

Entonces, volviendo a la experiencia que tuvimos en El Jardín del Mar, tengo que decir que ha sido espectacular. Es la segunda vez que venimos, y la verdad es que no decepcionó. Desde que llegamos, el ambiente ya te atrapa. Está todo tan bien decorado, y la luz suave crea un lugar perfecto para relajarte y disfrutar de la comida. ¡No es de extrañar que tenga 5 estrellas en todas partes!

La comida, ¡madre mía! Todo lo que probamos fue riquísimo. Nos dejamos guiar por las recomendaciones del camarero y no solo le agradecemos a él, sino también al chef por lo que nos puso en el plato. La combinación de sabores, la frescura de los ingredientes… de verdad que hay que repetir. Estábamos tan encantados que, cuando llegó el momento de dejar propina, nos encontramos con que no teníamos cambio de 20 euros y el camarero, súper amable, nos dio dos billetes de diez. Fue un detallazo, la verdad.

Y sobre el servicio, ¡qué decir! Estaba en su punto: 5 estrellas también. Todos muy atentos, haciendo que te sientas como en casa y a la vez en un lugar especial. Te dejan disfrutar de la comida sin prisa, pero siempre están ahí para lo que necesites. Así que, sí, si te preguntas si el personal de El Jardín del Mar es amable, definitivamente la respuesta es un rotundo sí. Sin duda, volveremos a visitarlos pronto. ¿Alguien se anima a repetir?

Fotografías Restaurante El Jardín del Mar