Mesón gallego O’carro siglo XXI

Mesón gallego O'carro siglo XXI

Si estás buscando un lugar donde disfrutar de autentica cocina gallega en un ambiente acogedor, el Mesón Gallego O'carro siglo XXI es tu destino ideal. Situado en Boadilla del Monte, este restaurante se ha ganado una sólida reputación con una calificación de 4.2 en Restaurant Guru, gracias a más de 2,000 reseñas y un menú que te hará la boca agua. Desde el clásico pulpo a la gallega hasta el rico lacón con grelos y la deliciosa empanada gallega, hay opciones para satisfacer a cualquier amante de la buena comida.

Inaugurado en 1989, O'carro es un auténtico homenaje a la gastronomía gallega, reflejando la pasión de una familia que comparte sus recetas aprendidas de generaciones. Aquí, puedes disfrutar de raciones generosas a precios asequibles, como sus menús del día que incluyen platos de cuchara por solo 12 €. El servicio es rápido y amable, lo que se suma a la experiencia de comer en este lugar. Así que si buscas un buen plan gastronómico, no dudes en visitar este rincón lleno de sabor y tradición.

Mesón gallego O'carro siglo XXI

Restaurante
4,2
2.114Reseñas
Fotos
Av. Siglo XXI, 9, 28660 Boadilla del Monte, Madrid
916 33 87 09

Horarios Mesón gallego O'carro siglo XXI

DíaHora
lunes12:00–1:30
martes12:00–1:30
miércoles12:00–1:30
jueves12:00–1:30
viernes12:00–1:30
sábado12:00–1:30
domingo12:00–1:30

El horario podría cambiar.

Mapa Ubicación Mesón gallego O'carro siglo XXI

Dónde se encuentra el Mesón Gallego O'carro siglo XXI

¡Hola, amigos! ¿Quién no ama una buena cena en un restaurante con aire auténtico? El Mesón Gallego O'carro siglo XXI en Boadilla del Monte es un lugar que ha tenido sus altas y bajas, pero siempre con la esperanza de encontrar lo mejor de la comida gallega. Hace poco fui con unos amigos a probarlo, y la verdad, fue una experiencia de luces y sombras.

Empezamos con las entradas y, aunque la alcachofa y las navajas dejaron mucho que desear, con puntuaciones de 2/10 y 4/10 respectivamente, no todo fue tristeza. Los mejillones estaban bastante buenos, con un 8/10, y la sepia cumplió con un 6/10, pero el verdadero desastre fue el solomillo de cerdo, que obtuvo un triste 0/10; estaba más seco que el desierto. Es raro porque en visitas anteriores nos habían dejado con muy buen sabor de boca, así que ya no sabemos si ha cambiado algo en el lugar.

Con todo y con esto, el codillo gallego fue como el superhéroe del menú: ¡espectacular! El pulpo a la gallega también estaba tierno, aunque muy finito para mi gusto. Luego, los postres rescataron la noche: probamos algunas tartas de chocolate, queso y zanahoria que estaban bastante ricas.

El servicio tampoco se quedó atrás en la montaña rusa. Tuvimos una camarera increíble, super agradable y profesional, pero hubo un tipo que no se comportó tan bien y no supo manejar unas preguntas sobre las parrochas que pedí, lo que generó un mar de confusión. La verdad es que deberían darle un poco de formación al personal sobre temas de alergias y profesionalismo, porque es súper importante.

Así que, si te estás preguntando dónde se encuentra el Mesón Gallego O'carro siglo XXI, está en Avenida Siglo XXI, 9 en Boadilla del Monte, Madrid. Si decides darle una oportunidad, espero que tu experiencia sea más de luces que de sombras. ¡Buen provecho!

Qué tipo de cocina se ofrece en el restaurante

Y si hablamos del Mesón gallego O'carro, hay que mencionar que siempre tengo la certeza de que voy a encontrar algo super rico. Cada vez que he ido, la calidad de la comida ha sido de 10 - algo difícil de encontrar. El menú que ofrecen, tanto el normal como el especial, siempre me sorprende. ¡Nunca olvidaremos esos gambones a la plancha! Son sencillamente especiales, y si vas a comer de menú, no te preocupes por las reservas, aunque vale la pena ir temprano porque el local es amplio y la terraza aún más grande. Si no encuentras mesa, la espera no me desanima, ¡ya que vale completamente la pena!

La verdad es que el servicio siempre ha sido muy correcto. La rapidez al tomar la comanda y la presentación de las platos es digna de elogiar. Aunque en una de mis visitas noté que los grelos que acompañaban al lacón no estaban a la altura, el resto de platos siempre compensan. Recomendé el pulpo a la gallega, y la oreja a la plancha, que también estaban muy buenos. Sin olvidar esas zamburiñas a la plancha que son un verdadero manjar. Si quieres una cena rica, este sitio es definitivamente recomendable.

Además, no puedo dejar de alabar cómo se sienten en el O'carro. El ambiente es alegre y vibrante, con un personal que se nota que le gusta lo que hace, amable y siempre atento. Mis amigos y yo hemos disfrutado de varios platos como el codillo, el arroz con bogavante, y el rabo de toro. Ya cuando crees que no puede ser mejor, el postre te deja sin palabras; las milhojas y las filloas son brutales. ¡Sin duda, volveremos más veces!

Entonces, ¿qué tipo de cocina se ofrece en el restaurante? Aquí puedes esperar una oferta centrada principalmente en la cocina gallega. Platos como el pulpo a la gallega, gambones a la plancha, y arroz con bogavante son solo un par de ejemplos de la rica, generosa y sabrosa gastronomía que encontrarás en O'carro. Así que si eres aficionado a la buena comida, ¡no puedes dejar pasar esta experiencia!

Qué calificación tiene el restaurante en Restaurant Guru

Y claro, no todo puede ser perfecto, ¿verdad? La última vez que fui a O'carro, éramos cuatro y, si te soy sincero, la comida estuvo genial y la atención del personal en general fue buena. Sin embargo, el que parece ser el camarero responsable de la planta baja estaba en su propio mundo. Al finalizar la comida, subí a pedir la cuenta. La otra pareja que iba con nosotros no se daba cuenta, así que yo pensaba que podía hacerlo en un ambiente discreto. Pero ¡vaya sorpresa! Este camarero me echó la bronca como si yo hubiera hecho el peor crimen del mundo por no haber ido directamente a él. La situación fue simplemente lamentable y eso te deja un mal sabor de boca. A veces estas cosas hacen que no tengas ganas de volver a un lugar, incluso si la comida es buena.

Pero oye, no todo es negativo. La primera vez que visité O'carro, quedé encantado. Como te digo, tienen un menú de 14 euros que es una pasada, y la comida sabe a hogar, a tradición. No sé si lo has probado, pero si te gusta el marisco, puedes elegirlo directamente de la vitrina. ¡Es súper fresco! Y no te olvides del postre. Su tarta de chocolate y la de queso son de otro mundo. De hecho, si me pides consejo, no puedes dejar de degustarlas.

También hay que resaltar que el restaurante es lo que podrías llamar "de toda la vida". Tiene esa esencia de los restaurantes gallegos que ofrecen platos bien cocinados y algo que valoramos siempre: el ambiente acogedor. La última vez pedí una ensalada de ahumados riquísima y unos callos que estaban para mojar pan. El entrecot que elegí fue un acierto total, se deshacía en la boca y, aunque no pude pedir postre porque ya estaba a reventar, para mí es un señal de que la experiencia fue 10 de 10.

Por cierto, si te preguntas cómo le va a este sitio en Restaurant Guru, déjame decirte que se alza con una calificación de 4.5 estrellas. Y aunque hay un par de cositas que mejorar, su comida y el ambiente bien vale la pena, así que lo que tienes que hacer es pasar y disfrutar de la experiencia. ¡A ver si te animas y me cuentas qué tal!

Cuántas reseñas ha recibido el Mesón Gallego O'carro siglo XXI

Ya te conté lo que me pareció el Mesón Gallego O'carro siglo XXI, y la verdad es que hay opiniones dispares sobre este lugar. Por un lado, hay quienes han tenido experiencias bastante decepcionantes. Como esa vez que decidieron hacer un cumpleaños y al llegar, ni rastro de la reserva. Todo el mundo corriendo para improvisar algo. Los entrantes llegaron en cantidades ridículas para 20 personas, y no hablemos de los entrecots: fríos y crudos. La atención fue un desastre, con los camareros atolondrados y un tiempo de espera que parecía una eternidad. En fin, una estrella para ellos, y no es de extrañar.

Por otro lado, hay quienes son más optimistas. En mis últimas visitas, he tenido una experiencia totalmente diferente. Te digo que la comida estaba muy bien preparada. Es una joya si te apetece explorar sabores gallegos. Entonces, si pides las raciones, ¡prepárate! Son inmensas. Hasta la camarera nos dijo: 'Mejor pedir medias raciones si no queréis llevaros más a casa'. Y la ensaladilla rusa, ¡tienes que probarla! La oreja a la plancha también está de rechupete, con ese punto que la hace irresistible. En este caso, podrían ponerle un cuatro estrellas, fácil.

Por último, lo que me parece increíble es cómo en una sola noche, un grupo de 20 personas puede tener experiencias tan diferentes. También escuché sobre un grupo que tuvo sus más y sus menos con los menús; un drama por las restricciones que les pusieron. Al final, todos se cuadraron con lo que era justo, pero vaya, menuda forma de comenzar una comida. En cuanto a la comida, recibieron una buena puntuación, pero el servicio y el ambiente se llevaron un golpe fuerte.

En las reseñas que revisé, parece que el Mesón Gallego O'carro siglo XXI ha recibido un total de 27 reseñas. ¡Así que ya sabes! Dependiendo de a quién le preguntes, la experiencia puede variar mucho. Pero tú, ¿te atreverías a probarlo?

Cuáles son algunos platos destacados del menú

La verdad es que mis últimas experiencias en el Mesón Gallego O'carro han estado un poco a la montaña rusa. Por un lado, celebramos mi cumpleaños allí, y elegí el sitio con ganas de disfrutar de una buena comida gallega. Sin embargo, llegamos y la bienvenida fue un poco fría, para no decir helada. La única persona con una sonrisa fue la encargada, mientras que el resto del personal parecía estar más interesado en mirar hacia otro lado que en atender a los clientes. El pulpo que trajeron estaba rancio, y no puedo creer cómo eso pudo salir de la cocina. Mis amigos y yo nos miramos y supimos que no íbamos a volver. Si buscas un buen sitio gallego, El Fisterra justo al lado es una opción mucho mejor.

Pero no todo es negativo, porque también pasé un rato increíble en una celebración familiar hace un tiempo. En esa ocasión, nos dieron una mesa en la parte de abajo, que es mucho más acogedora y espaciosa. Era genial ver que cuando llegamos, el aperitivo ya estaba listo y un camarero mayor se encargó de nosotros de una manera muy amable. Era el tipo de servicio que te hace sentir como en casa. ¡Hasta nos invitó a un chupito! La comida fue un festín de sabores, y la calidad se notaba en cada plato. No sé si los postres le dieron tiempo a alguien a sacarles una foto, porque estaban deliciosos, ¡se esfumaron en un santiamén!

Y para ser totalmente justos, al menos en mis otras visitas, me he dado cuenta de que el Mesón Gallego O'carro tiene potencial. Su local es grande y limpio, y hay platos que realmente destacan. Te recomendaría probar la oreja a la plancha, el lacón a la gallega y la ensaladilla rusa, porque siempre han sido éxitos en la mesa. Si decides darles otra oportunidad, podrías encontrar una experiencia más que aceptable, aunque mi recomendación sería siempre tener un plan alternativo en mente, como El Fisterra. Al final, se trata de disfrutar de una buena comida con buena compañía, ¿verdad?

Desde cuándo está abierto el Mesón Gallego O'carro siglo XXI

Y hablando del Mesón Gallego O'carro siglo XXI, ¡qué gran descubrimiento! Si buscas un sitio donde disfrutar de buena comida a un precio que no te va a dejar en banca rota, este es el lugar. La verdad es que la comida es muy rica y las raciones son abundantes, así que eso de pedir un par de platos y acabar con hambre aquí no pasa. El lacón a la gallega es, sin duda, un must. Ese sabor auténtico de Galicia te transporta a otra parte, ¡y encima sueltan el pan que sobra para que te lleves a casa y te hagas unas tostadas al día siguiente! Quién no querría llevarse un pedacito de felicidad gastronómica a su casa, ¿verdad?

Por otro lado, y aunque la mayoría de las experiencias que he escuchado son positivas, hay que reconocer que no todo el mundo ha tenido la misma suerte. He oído historias de quienes terminaron frustrados con el servicio, sobre todo si te toca un día malo. Hay quien incluso llegó a esperar más de una hora para que les sirviesen la comida, solo para encontrarse con un trato que dejó mucho que desear. La verdad que eso se siente mal, porque no debería ser la norma. Pero bueno, al menos parece que no les falta el ánimo con el que tratar a sus clientes, aún si es un poco rudo. Viendo esas críticas, es bastante obvio que necesitan darle un toque extra al tema del servicio.

Con todo, hay que darle un guiño a la buena comida y al ambiente del lugar. La terraza está bastante bien, aunque lo de encontrar sitio para aparcar puede ser una odisea. Es un poco complicado, así que prepárate: si vas, quizás te toque dejar el coche en zona azul y tener un poco más de paciencia en ese aspecto. Pero hablando de la cena en sí, siempre es mejor disfrutar de una buena charla entre amigos o familia mientras saboreas un plato que realmente vale la pena. ¡A veces hay que arriesgarse!

Y si te preguntabas desde cuándo está abierto el Mesón Gallego O'carro siglo XXI, la verdad es que lleva un tiempo dándonos alegría a los paladares en Boadilla del Monte. Así que, ¡anímate a darle otra oportunidad! Tal vez en tu próxima visita encuentres ese plato que te haga volver una y otra vez.

Qué tipo de ambiente se puede esperar en el restaurante

Así que, como te contaba, nos reunimos en el Mesón Gallego O'Carro, y elegimos un menú de cena para amigas del trabajo, que costaba 35 euros por persona. La verdad es que la cantidad de comida fue un poco escasa; había que compartir raciones entre cuatro, así que quedamos con una sensación de que nos faltaba un poquito más. Pero bueno, lo rico lo compensa, ¿no? El vino estuvo aceptable, y el postre también era para compartir, así que al final nos fuimos satisfechas, aunque un pelín menos llenas de lo que esperábamos. Por lo que veo, el servicio y el ambiente también se llevan un 3 estrellas, lo que se traduce en que estuvo correcto, pero sin grandes alardes.

Luego, en otra ocasión pedimos directamente platos que no estaban en la carta y te aseguro que aquí es donde la cosa se pone interesante. Los gambones a la plancha fueron lo más destacado de la noche, estaban para chuparse los dedos. Solo un camarero fue realmente atento y amable, aunque el aire acondicionado estaba un poco fuerte, así que mejor iba con una chaquetita si decides ir en días frescos. El precio, en ese caso, fue entre 20 y 30 euros, y la comida se llevó un buena nota de 5 estrellas por la calidad.

Si quieres lo mejor de lo mejor, no puedes dejar de probar las zamburiñas y el solomillo, que están riquísimos. La relación calidad-precio es realmente excelente, y a veces hasta puedes hacerte un desayuno espectacular si te pasas por allí por la mañana. Te prometo que no te arrepentirás; son muy recomendados para carnes rojas, pescados y mariscos. Pero no todo fue perfecto; recuerdo que una vez nos sirvieron unas patatas fritas de aperitivo que no estaban a la altura. Además, la carne rubia gallega la pedimos poco hecha y llegó fría por dentro, lo que no es lo ideal. La buena noticia es que todo lo demás estuvo de lujo.

Y ya para cerrar con broche de oro, el ambiente en el Mesón Gallego O'Carro es bastante acogedor. No es un sitio ruidoso, y podrías ir tanto en un plan de cena tranquila como para una celebración más animada. Está claro que el servicio puede mejorar, pero la buena comida y el trato amable que a veces recibes hacen que la experiencia en general se sienta bien. Así que, si buscas un buen sitio para disfrutar de ricas tapas y platos gallegos, definitivamente le daría una oportunidad.

Cuáles son las opciones de precios en O'carro

Así que, después de lo que vivimos en el Mesón Gallego O'carro, no sé si reír o llorar. Primero, elegimos comer el menú del día, que tenía toda la pinta de ser una buena opción. Pero ahí empezó el desastre. Pregunté por una berenjena rellena y me dijeron que era de carne. Cuando me la trajeron, me encontré con una mezcla de atún, cebolla y pimientos, que nada tenía que ver con lo que esperaba. ¡Vaya forma de empezar! Mi marido, que decidió pedir espaguetis a la carbonara, sufrió lo mismo: el ragú de ternera estaba seco y la carne, bueno, mejor no hablar de la grasa.

Y como si eso no fuera suficiente, el servicio hizo que todo se sintiera peor. Recuerdo un momento en el que un señor al lado preguntó si la tarta de queso era casera y el camarero solo pudo decir “creo que sí, un poco”. ¿Qué significa eso? ¡Vamos, un poco de sinceridad, por favor! Por no mencionar cómo te quitaban el plato mientras aún masticabas o la mirada de desprecio por pedir sal. Con ese servicio y la comida que no cumplía, decidimos que no volveríamos, y vaya que escribí una reseña.

Pero por otro lado, hay quienes tienen experiencias completamente diferentes en este lugar. Algunos amigos han ido varias veces y dicen que es de los mejores en Boadilla. Ellos hablan maravillas de la comida, especialmente de los calamares, zamburiñas y el risotto. Y lo mejor de todo, el servicio que han recibido ha sido de diez. Incluso cuando hubo un pequeño malentendido, la responsable hizo todo por solucionarlo. ¡Eso sí es un buen trato!

Así que, ¿cuáles son las opciones de precios en O'carro? Bueno, el menú diario está alrededor de los 13 euros y otros platos rondan entre los 20 y 30 euros, dependiendo de lo que pidas. Hay que decir que, en general, la relación calidad-precio suele estar bastante bien para el tipo de comida que ofrecen, aunque mi experiencia se alejó un poco de esa realidad. En resumen, si vas, ¡ten cuidado con lo que pides y no olvides preguntar bien!

Ofrecen menús del día

Y hablando del Mesón Gallego O'carro, ¿has estado últimamente? La verdad es que es un lugar agradable, con mucha esencia gallega. Aunque, tengo que ser honesto, la comida no es siempre lo espectacular que uno espera considerando lo que se paga. Puede que no sea la primera vez que lo visito, pero siempre me encuentro con lo mismo: un ambiente agradable para tomarse unas cervezas y tapas, y sin duda, productos del norte que valen la pena. En cuanto al precio por persona, suelo salir con la cuenta entre 30 y 40 euros. Ni tan mal, ¿verdad?

El otro día, me decidí a comer el menú especial y, para ser sincero, no era exclusivamente comida gallega. Pero, oye, las alcachofas estaban ricas y eso siempre suma. Eso sí, un pequeño detalle que me hizo fruncir el ceño fue que los chipirones llegaran fríos. Tal vez la multitud de gente influyó un poco en el servicio ese día. Aún así, el sitio es realmente agradable, así que vale la pena.

Hablando del servicio, tengo que decir que hay veces que el trato es excelente. Te atienden con una simpatía que te hace sentir como en casa, y la calidad de la comida es bastante buena. No es precisamente el lugar más barato, pero hay que reconocer que la relación calidad-precio es decente. Es uno de esos sitios por los que merece la pena repetir y que ya está en mi lista de favoritos.

Ahora, si estás pensando en reservar un menú del día, podría ser un poco complicado. Aunque hay menús, lo que parece es que no siempre son opcionales, o al menos no de un modo tan flexible como uno podría desear. La última vez, por las circunstancias, nos dijeron que las reservas eran solo para la carta, lo que no nos aclararon por teléfono al hacer la reserva. Así que, en caso de que quieras ir en grupo, asegúrate de tener todo claro antes de ir para evitar líos. En resumen, O’carro puede ser un buen plan, pero siempre es mejor ir preparado.

cuánto cuestan

Ya te comenté cómo fue la última vez que fui al Mesón Gallego O'carro y, aunque estuve deseando disfrutar de una buena comida, la experiencia fue un desastre total, especialmente por parte de la camarera. La verdad es que me pareció increíble que, después de hacer una reservación, tuviera que escuchar tres veces que había un “error” de mi parte. Mirar la foto de sus notas en el móvil no ayudó mucho, la verdad. Un trato despreciativo de ese tipo, sobre todo cuando eres cliente habitual, te deja un mal sabor que no se olvida. Así que, evidentemente, esa camarera ha conseguido que no volvamos.

En cuanto a la comida, cuando acertamos con los platos, la situación parecía mejorar un poco. Aunque las raciones eran escasas, esos sabores auténticos de la cocina gallega parecían prometedores. Eso sí, si caes en la planta de abajo, prepárate porque puedes pasar horas esperando. Esa falta de atención al cliente se siente mucho, especialmente si ves que a las mesas de arriba les llegan los platos casi volando. Y no digamos nada sobre el ambiente que logramos captar: tres horas comiendo para lo que debería ser una buena cena acaba siendo una pesadilla.

Ahora, volviendo a lo que importa, la comida, te puedo decir que los precios por persona van de 20 a 40 euros, dependiendo del menú que elijas. Un día te puede sorprender con un menú del día decente y platos como el cocido que estaba muy bien, pero te urge pedir el pulpo a feira o los gambones a la plancha si quieres algo más que un plato que te deje con hambre. Pero con la experiencia reciente, será difícil aventurarse otra vez. A veces, es mejor buscar otro lugar en Boadilla del Monte para disfrutar con amigos sin tantas complicaciones. ¡Ya te diré si descubro un sitio nuevo!

Es el servicio en O'carro rápido y amable

Entonces, si estás buscando un lugar donde disfrutar de buena comida gallega, tienes que hacerte un favor y visitar el Mesón Gallego O'carro. Está en la Avenida Siglo XXI, 9, 28660 Boadilla del Monte, y créeme, ese sitio es pura tradición gallega pero con un toque moderno. Desde que cruzas la puerta, se nota que aquí saben lo que hacen. La decoración es acogedora y te hace sentir como en casa, lo que ya es un buen comienzo, ¿verdad?

La carta es un sueño para los amantes del buen comer. Piensa en pulpo a la gallega, empanadas y una variedad de pescados frescos que te harán querer pedir de todo. Y no te olvides del famoso lacón con grelos; es uno de esos platos que te hace sentir que realmente estás en Galicia. Pero no todo se queda ahí, porque si eres de los que no se pueden resistir a un buen postre, te va a encantar el tarta de Santiago. Es todo un clásico que no puedes dejar pasar.

Y hablemos de la parte más importante: el ambiente. Aquí siempre hay un grupo de amigos disfrutando de la comida y de unas buenas copas de vino gallego. Es el sitio perfecto para desconectar después de un día agitado. Te sentirás parte de la familia desde el primer momento, y seguro que te acabarás quedando más tiempo del que planeabas.

Respecto a la rapidez y amabilidad del servicio, puedo decirte que, por lo general, el personal es súper atento. En O'carro, se nota que les importa que disfrutes de tu experiencia, así que si buscas un trato cercano y amable, este es el lugar. Aunque a veces puede haber un poco de espera cuando está lleno, siempre son amables y te hacen sentir bienvenido. Así que, ¿venimos a O'carro? ¿Te apetece?

Fotografías Mesón gallego O'carro siglo XXI

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